Huelva Buenas Noticias realizó la entrega de los IV Premios Buena Gente de Huelva, un reconocimiento muy necesario hoy en día. Un espacio en el que, desde 2018, se reconoce a gente de la calle, personas que desinteresadamente se ocupan en mejorar la vida de los demás. Hoy es el momento de ver una extensa galería del evento, porque una imagen vale más que mil palabras. 
 
Organizado por la Fundación Cajasol y Huelva Buenas Noticias, la cita ha convocó el pasado miércoles 28 de septiembre en el Gran Teatro a todos los responsables de administraciones públicas de esta provincia y una relevante representación de la sociedad onubense. El objetivo era ensalzar valores humanos y ejecutorias personales modélicas. 
 
El evento celebrado en el Gran Teatro ponía punto y final a un proceso iniciado en julio. Resultado de este han sido reconocidos los siete Buenas Gentes de Huelva de la presente edición, así como los restantes nueve nominados. 
 
La Gala de los Premios Buena Gente de Huelva se inició con una interpretación de piano y violín, tocados por Manuel Boniquito y Laura Fernández Trufero. ‘Meditación’, de la ópera ‘Thais’, ha sido el tema elegido para abrir la velada. 
 
Los nueve nominados recibieron unas distinciones especiales por su aportación a la sociedad y ser muy ‘Buena gente’: Ana Gil (lo recibió inicialmente su hijo, Marcos Sanchís Gil), Merlina Moreno, Celes Vizcaíno, José Julián Cepeda, Leni Vázquez Almazán, Cinta Martos, Jesús Flichi, Manuela Romero y Juan Pérez -Cuartelillos-. 
 
 
Premiados 
Tras ello, comenzaría la entrega de los galardones, que inició con el momento más emotivo de la noche, la entrega del premio a título póstumo del polifacético artista moguereño Nicolás Capelo, muy querido en Huelva y que, trágicamente perdía la vida el pasado mes de julio. Imposible no emocionarse con las palabras de su hijo Nicolás, que subió a recoger el galardón junto a su madre y viuda de Capelo, Inmaculada Carrasco. 
 
Tras Nicolás Capelo recogió su reconocimiento Javier Galardi, que agradeció la distinción y se la dedicó a sus familiares que estaban en la sala, en particular a su mujer, Rocío. Le sucedió Luisa García Romero, que reivindicó la acción social en el Distrito 5 y realizó un canto al empoderamiento de las mujeres. Franky Ruíz recibió a continuación su reconocimiento, comentó que en ese escenario había actuado muchas veces, pero nunca en términos de expresarse como lo estaba haciendo en ese momento. 
 
Llegó el turno de Luís Anes, uno de los 100 mejores profesores del mundo que, como no, habló de la importancia de la educación, particularmente la que afectaba al sentido de los premios, la de los valores. Tras él llegó El Pecas que demostró que su forma de expresarse es cantando y se arrancó por fandango. Y la última marina la recibió una persona muy especial, el sacerdote Teodoro Bernal.