El saltador de longitud onubense Héctor Santos, que este año se ha quedado a tres centímetros de la mínima para Tokio 2020, afirmó que está centrado en mejorar “la fuerza” y en ser capaz de transmitirla “a la velocidad” para alcanzar su ansiado salto de 8,22 y poder cumplir el “sueño” de estar en la cita olímpica. 
 
El atleta ha logrado romper la barrera de los 8 metros varias veces y ha dejado su marca personal en 8,19, muy cerca de los 8,22 a los que aspira, para lo que declaró que ya entrena en la dirección marcada y tiene claro que “la mejora está en la misma línea” que han trabajando este año. 
 
“Cuando estoy rápido me cuesta mucho menos hacer buenos saltos”, explicó el saltador internacional de 21 años, para quien el trabajo de fuerza marcado por su técnico, Juan Carlos Álvarez, ha sido fundamental para ganar potencia, faceta en la que tiene un gran margen de mejora que sumar a su buena capacidad de batida. 
 
Héctor Santos confía en sus posibilidades, por lo que manifestó que “de momento” está “tranquilo” y “centrando en entrenar lo mejor que pueda e ir mejorando”, y añadió que, cuando empiece a competir, “seguro” que ve “los 8,22 como el objetivo principal” y el desafío por el que tiene que “luchar”. 
 
Recalcó que tiene “muy claro” que su gran sueño y meta es estar en Tokio 2020, y tampoco pierde de vista que después de los Juegos Olímpicos se disputarán los Campeonatos de Europa Absolutos de Atletismo en París, que también son “un gran objetivo” para él. 
 
Por el momento, en este periodo de vuelta al trabajo ha conseguido librarse de unas molestias en la espalda que le estaban “limitando bastante” y ya mira con más optimismo a la siguiente etapa de su preparación. 
 
Santos debutó este año en unos Mundiales en Doha, donde no pudo clasificarse para la final, y antes fue subcampeón de Europa sub23, subcampeón nacional absoluto tanto en pista cubierta como al aire libre y campeón de España sub23 batiendo el récord de Yago Lamela. También fue subcampeón de Liga y Copa del Rey con el F.C. Barcelona.